lunes, 3 de mayo de 2010

Una empresa de colectivos de Dinamarca instala "asientos del amor"

Yo quiero viajar en estos colectivos, suena interesante el experimento, estas son cosas que se pueden hacer en el primer mundo, paises civilizados y abiertos de mente:

Una empresa de colectivos de Dinamarca instala "asientos del amor", reservará un par de lugares en cada una de sus 103 unidades para pasajeros que estén dispuestos a entablar una relación con quien se ubique a su lado. Los asientos estarán tapizados de rosa.
El espíritu celestino ronda las oficinas de los directivos de una empresa de transporte de Dinamarca, quienes decidieron reservar en cada unidad dos "asientos del amor" para que sean ocupados por usuarios ávidos de encontrar a su media naranja en lo que dura un viaje por la ciudad.

Las miradas profundas y sostenidas, algún que otro cabeceo o piropo al pasar, formarán parte de la batería de medidas que quedarán en el pasado para los casanovas modernos de los colectivos daneses. Ahora la tarea para ellos será mucho más fácil, ya que la empresa Arriva dispondrá en cada uno de sus 103 micros de un par de asientos recubiertos en tela de color rosa con un cartel que dirá Kaerlighedssaede, que en español significa "asientos del amor".

La idea es que allí se ubiquen pasajeros/as que estén con ganas y dispuestos a mantener una charla con su coyuntural compañero/a y, si hay "química", que el viaje se convierta en el puntapié de una futura relación.

En principio, el experimento social durará dos semanas, pero tiene altas chances de prolongarse en el tiempo, sobre todo porque varias pruebas piloto ya dieron resultados positivos, según el vocero de la compañía, Martin Wex. "Me contaron que los jóvenes se sentaban en esos lugares con una gran sonrisa", señaló.

Más allá del objetivo estrictamente romántico, la iniciativa persigue una meta ambiental, cuyas probabilidades de éxito son algo dudosas. La empresa busca, apuntó Wex, "atraer al autobús a la mayor cantidad de pasajeros posible, para que quien viaja solo deje su automóvil en un estacionamiento, incentivado por la posibilidad de hallar la felicidad".

Con este proyecto, el bondi en Dinamarca dejará de ser un medio y se convertirá en un fin para las almas solitarias (y algún que otro "pirata", claro).


Fuente, Diario Clarin

No hay comentarios:

Publicar un comentario